viernes, agosto 27, 2010

Festín de ebulliciones

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Los canallas no percibieron nuestros susurros, nuestras voces quebradas que permanecen vibrando en la tenue luz de la memoria de la piel, ni un sólo vocablo se ha perdido, cada sentido retiene su fulgor y su resonancia despejará la noche.

Debemos poner los espejos frente a frente, debemos encender las bocas y que sus gemidos y suspiros se troquen en flama que crepiten ardientes alentando la lumbre de las utopías, debemos poco a poco reactivar el magma profundo y resguardarlo en la entraña efervescente pulsátil, hirviente, en lo que es imperioso, en lo que es dulce hedonismo, en lo que es tuyo y mío.



Siento tus manos recorrer mi pecho desnudo a la luz de las velas
es un momento asombroso de intumescencias… de erecciones y turgencias, algo se sale de sí, por el toque de la yema de los dedos, por la presión fugaz o en bloque, por la incandescencia de la lengua...

Una explosión de besos contenidos irrumpe, me moviliza y hace que mis manos exploren por tu piel… Acarician los ángulos de tus montañas de alabastro, que han de fundirse como la blanca nieve se derrite en el estío del cenit del astro rey. Mis besos de lluvia caen sobre tu cuerpo-tierra y todo tu cuerpo se agita con ellos…



Tus ojos miran mi piel y brillan inmensos Tus manos me recorren y acarician como dulce aletear de mariposas y me hacen arder en deseos, sientes el volcán de mi fuego crecer, casi explotar… al hundir tus dedos por la fisura, hay barboteos de placer subintrante… en mesetas, que se emplazan unas sobre otras como pirámide azteca

Danzaremos jubilosos por las estrellas… bajaremos en un lamento y subiremos al firmamento… llenos de melaza de besos… y caricias esplendidas consumiendo tus horas encendidas. en tu fuente de vida encuentro el placer hirviendo y mi fuego allí exaltado, poco a poco va creciendo… imantado por tus cicatrices. ora subiendo… ora bajando… subiendo y bajando escalón tras escalón rumbo al altar del placer infinito, siempre tu apasionado pene rimando, penetrando y ardiente marcará un ritmo lento primero Y luego como caballos salvajes corriendo, será un arriba y abajo… y al unísono un vibrando y gimiendo…


Tus besos y mis besos como lengua de fuego en un éxtasis de principio a fin… tuya moriré, mío vivirás, mis labios buscarán con ansia tu sexo ardiente… y tu boca buscará en mí tu placer latente tu sabor se verterá en mí… mí sabor vivirá en ti, mi lengua se quedará en tu geografía… y tu boca se quedará en mi caligrafía sin altos ni detentes… gemidos, resplandores… delicias sin puertas ni ventanas ritmo y sentimiento para una entrega total

él: - oh… siento tu espalda caliente…

Yo: - oh… siento tu ser hundiéndose y deshundiéndose lentamente en mis carnes… me enloqueces

él: siento el gozo expandiéndose...

Yo: (de nuevo) - oh… siento que me desbordo, cuando siento que te vienes y vas llenando mi copa, crisol ardiente… con tu esencia vital…


Mágico ritual ha llegado a su fin… Tú a mi lado yo a tu lado… Los dos… mar en calma, en el lecho todo está en calma… festín de ebulliciones, de floraciones de rosas con olor al dulce néctar del placer

En un lecho… de sabanas infinitas manchadas de esencias con olor a amor, en un lecho donde tú nada y yo ave entendimos lo que es amar Y yo en paz contigo mi deuda prometida aquí he saldado….
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